El independentismo ya tiene claro lo que ha de hacer: proclamar inmediatamente la independencia y contestar al requerimiento del presidente español, Mariano Rajoy, que ya no puede interferir Cataluña porque es un Estado soberano. Ese es el mensaje que el 'president' Carles Puigdemont ha recibido de la Asamblea Nacional Catalana (ANC), de Òmnium Cultural, de la CUP, del pequeño partido Demòcrates (desgajado de UDC), de ERC y deamplios círculos de su propio partido, el PDeCAT.
“La humillación al pueblo de Cataluña, a los más de dos millones de personas que votaron sí el 1 de octubre, esta humillación es definitiva. El requerimiento de Rajoy y su ataque de aplicar el artículo 155, además, ha sido un ataque visceral a Cataluña. Y el tono despectivo de la mayoría de los líderes parlamentarios en el Congreso de los Diputados es otra prueba. Ahora es ya incuestionable que se ha de levantar la suspensión y proclamar inmediatamente la República catalana”, dice a El Confidencial un alto cargo del PDeCAT.
La propuesta que, en resumen, ha recibido Puigdemont es que levante la suspensión de la independencia a las 9 de la mañana del lunes y, a continuación, responda al requerimiento de Rajoy, que establece las 10 de la mañana como límite máximo para contestar o, de lo contrario, el Gobierno español aplica el artículo 155 de la Constitución, interviniendo la autonomía. Y la respuesta de Puigdemont, en ese caso, sería que “Cataluña ya es un Estado soberano y yo, como ‘president’, no admito requerimientos de otro Estado. Por tanto, ustedes no pueden aplicar el artículo 155 en un Estado que ya no está bajo su competencia”.
El razonamiento independentista parte de la base de que la declaración de la independencia y la proclamación de la República catalana es completamente legal y establece un nuevo orden jurídico en esta comunidad. Esta vulneración de la legalidad vigente, sin embargo, es lo que impedirá que Cataluña sea reconocida como Estado independiente no ya por las instituciones de la UE, sino por el resto de organismos internacionales, incluida la ONU.
“Si contesta con alguna ambigüedad, significará que no quiere el diálogo y el Gobierno tendrá que aplicar las medidas que corresponda”, dijo ayer el ministro del Interior, Juan Ignacio Zoido, en una entrevista con la radio Cadena COPE. “Si dice que sí, se habrá puesto nuevamente fuera del marco de la ley” y “habrá demostrado que cuando ofrecía un diálogo no lo ofrecía con sinceridad”, sostuvo.
Los analistas apuntan que el objetivo principal sería convocar elecciones, una competencia reservada de otro modo al Gobierno regional, pero Xavier García Albiol, líder del Partido Popular (PP) de Rajoy en Cataluña, pidió intervenir a largo plazo la Policía autonómica (Mossos d’Esquadra) y la educación, usada sobre todo en algunos puntos del interior de Cataluña para “enseñar a odiar a España”. (DPA)
El consejo político de la CUP ha aprobado esta tarde que la próxima semana se celebre un pleno extraordinario monográfico en el Parlament que termine con "la proclamación solemne del Estado catalán independiente en forma de República". En un comunicado hecho público esta tarde, la organización independentista ha indicado que este pleno debería "hablar de la república catalana y del inicio del proceso constituyente" y culminar con la proclamación de la república. De esta manera, argumentan, "se podrían hacer efectivos los resultados del referéndum del día 1 de octubre después de que el Estado español haya cortado cualquier opción de diálogo y mediación".
La justicia está en ‘stand by’ a la espera de que Carles Puigdemont dé una respuesta al requerimiento sobre si declaró o no la independencia. La fiscalía y el Tribunal Constitucional están dispuestos a actuar si contesta afirmativamente e impulsa la creación de un estado propio, según informa Ángeles Vázquez.
Podemos, pese a criticar al PSOE por acordar el inicio hacia una reforma constitucional con el PP, es firme partidario de implementar el derecho a decidir en la ley fundamental, mientras que Ciudadanos participará en la comisión pero para evitar que se "recompense" a los independentistas y, frente a sus pretensiones soberanistas, se fortalezca el Estado.
El Gobierno planea activar la reforma del sistema de financiación este mismo mes, vía que caminará de forma paralela a la comisión para acometer los cambios en la Constitución que ha impulsado el PSOE y a la que ha arrastrado a Mariano Rajoy. Hacienda pedirá a las comunidades un representante para iniciar la negociación económica en breve, mientras el PSOE defenderá que Catalunya sea considerada “nación” en los cambios en la ley fundamental, tal como explican Gemma Robles y Juan Ruiz Sierra.
El independentismo ha redoblado la presión para que Carles Puigdemont mantenga el rumbo hacia el Estado propio y deje de lado las hipótesis sobre una negociación respecto a la reforma constitucional. Tanto ERC, como la CUP y la Assemblea Nacional Catalana, así como el PDECat, no quieren aparecer en ningún modo como los que quieren poner frenos o sordina a la independencia de Catalunya en beneficio de un supuesto diálogo con el Gobierno del PP. Así las cosas, estos actores implicados han aprovechado este sábado para poner sobre la mesa sus reclamaciones en relación a los próximos pasos a seguir, según informa Fidel Masreal en un artículo titulado 'El independentismo redobla la presión a Puigdemont a favor de la DUI'.
El movimiento separatista catalán enfrentaba crecientes luchas internas por la estrategia adecuada para culminar el viejo deseo de que la región sea en un Estado independiente a horas del plazo fatal del lunes, fecha del ultimátum que le fijó el gobierno español para aclarar su postura.
Los separatistas radicales, que quieren que la próspera comunidad autónoma de 7,5 millones de habitantes se separe de España, aumentaron su presión por una declaración definitiva de independencia. Los moderados todavía esperan iniciar negociaciones con las autoridades centrales españolas, que insisten en que fue ilegal el controvertido referéndum en el que se basaría tal declaración de independencia.
Las divisiones se ampliaron el sábado, cuando el partido de ultraizquierda CUP, socio de la coalición que gobierna en Cataluña, exigió que el presidente de la Generalitat catalana, Carles Puigdemont, afirme de manera inequívoca de la independencia catalana antes del el plazo .
Si Puigdemont no cumple, El CUP podría retirar su apoyo a la coalición gobernante en el Parlamento regional catalán, dijo su portavoz, Nuria Gibert. “ Una medida de este tipo probablemente derribaría al gobierno y obligaría a convocar a elecciones
No hay diálogo posible, no hay mediación posible (con España)”, dijo Gibert. En cambio, Puigdemont pidió a los legisladores separatistas que retrasaran la declaración directa de independencia durante “unas semanas” para dar más tiempo al diálogo con el gobierno central en Madrid. Mientras , el principal aliado del presidente regional apeló a los secesionistas a dejar de discutir y apoyar a su líder. “Debemos mantener la unidad necesaria para recorrer todo el camino en esta senda hacia una república”, dijo el vicepresidente , Oriol Junqueras, de Esquerra Republicana
El gobierno central de Mariano Rajoy no quiere mediación y dio de plazo a Puigdemont hasta mañana a las 10 para que diga si declaró o no la independencia.
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