Les comento sobre los motivos que dieron lugar a las tres protestas en el obelisco Rosario y Avellaneda (santa Fe) motivado por la sorprendente cantidad de falsedades, virulencia y tergiversación de la misma por parte de casi todo el espectro mediático hegemónico y no hegemónico, lo que logra intensificar aun más el descontento y potenciar a estos mismos manifestantes.
Les decía que hay una figura central en todo esto banderazo . Un magnate globalista, un uno tema vicentin y otro anti curentena, especialista en injerencia en los pueblos del mundo.
De acuerdo a la convocatoria hecha a través de las redes sociales y comunicados de los distintos sectores, se prevé que la manifestación se extienda en 69 localidades de todo el país, con epicentro en Avellaneda, donde se encuentra la sede de la empresa exportadora de granos.
Esto no es lo único que escandaliza a los anti - cuarentena y no hay nada peor para el campo nacional y popular que intentar debatir sin información, porque viene cualquier liberal de poca monta a reproducir su discurso antigubernamental y nosotros hacemos agua tildándolos de terraplanistas, cuando en algunos casos saben más de nuestro gobierno que nosotros mismos.
protesta se da a horas de que el Gobierno retrocediera de su idea inicial de expropiar y tomara en cambio la propuesta del gobernador santafesino Omar Perotti como una alternativa tras el fallo judicial adverso de la Justicia . Perotti llevó ayer a la Casa Rosada la iniciativa que implica el desplazamiento del directorio actual y una intervención judicial que designe un Órgano Interventor de la megaempresa.
Todo esto no es un secreto bajo llave, esta en Google a disposición de cualquiera que tenga ganas de informarse.
Esto nos lleva a inferir que Soros no solo tiene influencia en nuestro ministerio de educación, sino también en nuestro ministerio de economía.
Como ven, toda esta cuestión no se resume a una opereta del macrismo o a la propagación de la locura colectiva fruto del aislamiento, sino que un grupo de personas esta cuestionando con datos concretos el hecho de que un banquero y magnate de las finanzas mundiales tiene demasiada influencia en nuestro gobierno. Después están la teorías de conspiración que les comentaba ayer que van desde lo más terrenal a cuestiones religiosas o místicas.
Por su parte, el presidente Alberto Fernández dijo este sábado que sigue "buscando los caminos para que el Estado se haga cargo de la cerealera, resuelva los problemas y tengamos una empresa que nos permita ver como ese mercado funciona y se desarrolla".
Con estos datos podemos empezar a confrontar con estos muchachos anti-estado, que sostienen que lo mejor que le puede pasar a un pueblo es que el mercado lo decida todo, confiando en esa mano invisible que es tan invisible que jamás la hemos visto y que lo único que ha logrado es hundir a millones en la mayor y absoluta pobreza y también cuestionarnos a nosotros mismos para ver, al margen de la cuarentena, hasta que punto es conveniente sostener este tipo de alianzas con personajes tan oscuros como el señor Soros.
Casi al mismo tiempo, manifestantes se concentraban esta tarde en el Obelisco porteño para cuestionar las medidas tomadas por el Gobierno para luchar contra la pandemia del coronavirus. Un centenar de personas a pie y una caravana de automóviles con banderas argentinas protestan en el microcentro porteño con una pluralidad de consignas que van desde el conflicto por Vicentin hasta el rechazo al aislamiento social frente al coronavirus. En tanto, en los barrios de Belgrano, Núñez y Recoleta se registraron algunos "cacerolazos" y bocinas de automóviles, como parte de la protesta.
No hay comentarios:
Publicar un comentario